miércoles, 22 de diciembre de 2010

Daño en cerebro elimina el miedo en una mujer

A SM, una mujer de 44 años, bien se le podría llamar la intrépida.
No teme manipular serpientes. No le tiene miedo a la más espeluznante película de terror. Cuando visitó una casa encantada, fue un monstruo el que se asustó de ella.

SM no es una sicópata ni heroína capaz de dominar sus emociones. Es una mujer común, madre de tres hijos, que tiene un impedimento sicológico particular, resultado de una enfermedad genética muy inusual que le dañó un área del cerebro llamada amígdala.

Su caso demuestra que la amígdala desempeña un papel clave en atemorizar a la gente en las situaciones amenazantes, dicen los investigadores.

Pero la historia de su vida también demuestra que vivir sin temores puede ser peligroso, dijeron.
Un estudio publicado el jueves en la edición en internet de la revista Current Biology, de la investigadora Justin Feinstein y colegas en la Universidad de Iowa, detalla el caso. Como es habitual, el informe sólo la identifica como SM. Feinstein no aceptó una entrevista con la Associated Press aduciendo la política del laboratorio sobre la confidencialidad.

Una experta no vinculada con el estudio advirtió que no se extraigan conclusiones apresuradas sobre la amígdala porque en su propio estudio con una mujer con daño cerebral similar no halló tal condición. Pero otro experto coincidió con las nuevas conclusiones.

SM ha sido estudiada durante más de 20 años y se han publicado muchos reportes sobre sus rarezas. Entre éstas se cuenta su dificultad para reconocer el temor en las expresiones faciales, por ejemplo.

En otro experimento, publicado en 1995, le hacían sonar una bocina estruendosa cada vez que aparecía un cuadro de color azul en una pantalla. Pese a la reiteración del hecho, nunca desarrolló el temor asociativo que un sujeto siente cuando le muestran el cuadrado del color vinculado con el bocinazo.

Otros exámenes demuestran que SM tiene resultados normales en inteligencia, memoria y lenguaje y que experimenta otras emociones aparte del temor. Lleva una vida independiente.


Aprueban primera medicina para la esclerosis múltiple

Hace cinco años, Jason DaSilva, un cineasta con esclerosis múltiple, podía caminar por su vecindario de Nueva York, visitando bares o cafés. Hoy necesita un andador para arreglarsélas porque el trastorno degenerativo del sistema nervioso ha empeorado y no hay nada para tratar la intensidad de la enfermedad.

Novartis AG está trabajando en una pastilla para cambiar eso. La farmacéutica obtuvo aprobación en septiembre para vender la primera medicina oral en Estados Unidos que trata una variante moderada de la esclerosis múltiple, y el ente reglamentario de medicamentos de la Unión Europea puede que haga lo propio ya el próximo mes. La compañía está comenzando a ensayar la pastilla, Gilenya, contra la variante de deterioro progresivo de la enfermedad que aflige a DaSilva.

"Hay aún una necesidad grande, una necesidad urgente'', dijo Alan Thompson, neurólogo de University College London. "Un agente oral sería algo muy importante''.

Gilenya podría estar encaminada a convertirse en el mayor producto de Novartis, con sede en Basilea, Suiza, la que cuenta con ingresos anuales de un promedio de $1,800 millones para el 2014 según el promedio de las predicciones de los analistas.

Las ventas pueden dispararse a $5,400 millones al año para el 2016 conforme el uso del medicamento se expande a la esclerosis múltiple avanzada, dice UBS AG. Gilenya es el medicamento más caro para la enfermedad, a un costo de alrededor de $48,000 anualmente.

El éxito ayudaría al jefe ejecutivo Joseph Jiménez a superar la pérdida del actual producto de mayor venta de Novartis, Diovan, que tuvo ventas por $6,000 millones el año pasado. El medicamento para la hipertensión comienza a perder la protección de patente de Estados Unidos en 2012.

La esclerosis múltiple hace que el sistema inmunitario ataque el tejido aislante que rodea las fibras nerviosas, llamado mielina, causando heridas e inflamación. Esto impide que las neuronas envíen señales, lo que causa síntomas como visión borrosa y debilidad muscular.
Los fármacos inyectados, entre ellos Copaxone, de Teva Pharmaceutical Industries Ltd., y Avonex, de Biogen Idec Inc., tratan una forma común de la esclerosis múltiple en la cual los síntomas van y vienen. La forma más debilitante, que puede privar a quienes la padecen de la capacidad de caminar, ha resistido toda terapia.

"Si pueden demostrar que funciona, entonces esto es un gol'', dijo en una entrevista Karl-Heinz Koch, analista de Helvea SA en Zúrich. "Es el santo grial''. Koch recomienda la compra de las acciones y dice que pueden subir 28 por ciento el próximo año.

Gilenya bloquea la circulación de los glóbulos blancos en el cuerpo, impidiendo que lleguen y dañen el cerebro, la médula espinal y los nervios ópticos.

El medicamento no solo protegió un cierto tipo de neurona en experimentos con ratas y en tubos de ensayos, sino que las ecografías de pacientes que tomaron el medicamento mostraron una merma en la contracción del cerebro, señal de que el tratamiento puede reducir la destrucción de nervios.